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El posible juicio político del Maloro Acosta, ha resultado detectar los pros y contras de los actuales diputados del poder legislativo, además de conocer sus fuerzas y debilidades, también su valentía y expertise en los temas, pero son de destacar la bancada del PRI Sonora, donde se pudiera decir de forma educada son "grises" en su desempeño legislativo, pero la realidad es que es una "bancada invisible". La labor que desempeñan en la presente legislatura es de "alcantarillado", moviéndose entre las sombras, tratando de comprar y convencer al viejo estilo priista "por debajo del agua" y comprando voluntades, dependiendo del tema un día sus clientes pueden ser los panistas, otro día los novatos diputados de la extinta y dividida coalición Juntos Haremos Historia (Morena-PT-PES).

No obstante que los diputados del PRI, cuentan con el aparato de gobierno y sus medios de comunicación, se percibe una resistencia inducida de no aparecer o aparecer lo menos en público, equiparando su labor legislativa a una especie de "mafia legislativa".

Es ya comprobado que los invisibles diputados de esta bancada, tienen alcances limitados, pero también parecieran estar conscientes de que es una chamba de 3 años, y que su "trabajo es meramente eventual y de tránsito", avocándose en servir de un "dique político" de temas incomodos para el gobierno de Sonora, conscientes también en que ninguno de ellos equivale a un proyecto político.

La última sorpresa de esta bancada invisible, fue la "doblegada o convencida" que le dieron a algunos diputados de Morena en el caso del posible juicio al ex alcalde Maloro Acosta, la novatez de estos últimos, sumados al hambre de sus asesores, los han llevados a los morenos a un tránsito accidentado en su novel camino político.

Hasta pronto, y recuerden que en PoliticusMx la forma es fondo…